Quizá lo has escuchado en alguna noticia, o te suena porque tu cuñado trabaja en una carpintería y dice que ahora “están con un proyecto contract”. Pero… ¿qué significa exactamente eso del contract?
En realidad, no es un contrato (aunque suene parecido), sino un modelo de negocio completo, que está revolucionando el sector de la madera en Galicia.
¿De qué va esto del contract?
La idea es sencilla: en lugar de fabricar muebles o piezas sueltas, las empresas gallegas se están especializando en proyectos integrales de amueblamiento. Es decir, diseñan, fabrican e instalan todo lo necesario para equipar un hotel, un hospital, unas oficinas o un restaurante, muchas veces en cualquier lugar del mundo.
Y cuando decimos todo, es todo: camas, armarios, puertas, panelados, techos, mostradores, iluminación, suelos… Todo hecho a medida, con criterios de diseño y sostenibilidad.
Este enfoque permite que una empresa no solo venda un producto, sino una solución completa, lista para entregar. De ahí que se diga que es un trabajo “llave en mano”.
¿Y por qué Galicia está apostando fuerte por esto?
Porque tiene todos los ingredientes:
Materia prima: madera local, de calidad, certificada.
Empresas preparadas: desde aserraderos hasta talleres de diseño y carpintería industrial.
Experiencia exportadora: muchas empresas gallegas llevan años vendiendo fuera.
Talento técnico y creativo: diseño, arquitectura, ingeniería.
Y, además, apoyo institucional: desde el Clúster da Madeira hasta la Xunta, están apostando por este modelo como motor de futuro.
¿Qué beneficios tiene este modelo?
Más valor añadido: no se vende madera en bruto, se vende diseño, solución, servicio.
Más empleo cualificado: se necesitan diseñadores, técnicos, montadores, gestores de proyecto…
Mejor imagen internacional: Galicia ya no solo exporta madera, también exporta diseño y soluciones sostenibles.
Más colaboración: carpinterías, empresas tecnológicas, diseñadores y arquitectos trabajan juntos.
Algunos ejemplos reales
Aunque muchas veces no lo sepamos, parte del mobiliario que vemos en hoteles de lujo en el Caribe, en centros comerciales en el norte de Europa o en edificios públicos de Marruecos ha sido diseñado y fabricado en Galicia, bajo este modelo contract.
En resumen
El contract no es una moda, es una forma inteligente de entender el futuro del sector. Significa dejar de vender solo materiales y pasar a ofrecer soluciones completas, bien diseñadas, bien hechas y sostenibles, desde Galicia para el mundo.
Y si todo esto sirve además para dinamizar el rural, dar futuro a nuestros montes y crear empleo de calidad, entonces no solo es una buena estrategia empresarial: es una apuesta de país.