Nos complace anunciar que BATLLE & SEOANE ABOGADOS ha obtenido una victoria judicial trascendental en la lucha contra el fraude empresarial.
El Juzgado de Primera Instancia Nº 17 de Madrid ha condenado a una importante aseguradora internacional a indemnizar a nuestro cliente con 259.992,63 €, a los que se sumarán los intereses legales, incrementando aún más la compensación.
El caso trata de un fraude de suplantación de identidad en una operación comercial. Un cliente nuestro había vendido una mercancía por un valor considerable (bombas y controladores industriales) a lo que él creía que era una empresa francesa solvente. Sin embargo, la empresa compradora resultó ser un impostor que suplantó la identidad de otra empresa legítima, lo que llevó a que nuestro cliente no recibiera el pago de dicha mercancía.
Nuestro cliente había contratado un seguro de crédito con una importante aseguradora internacional para protegerse contra la falta de pago de deudores, pero, declarado el siniestro, la aseguradora rechazó la cobertura. La aseguradora alegó que no tenía la obligación de cubrir este siniestro porque el comprador fraudulento no era la empresa que había sido evaluada y clasificada como solvente por ellos, y por tanto, la deuda impagada no correspondía a una operación asegurada.
Sin embargo, el tribunal determinó que la aseguradora falló en sus obligaciones de diligencia al no realizar las comprobaciones necesarias sobre la identidad del comprador, a pesar de conocer la proliferación de este tipo de fraudes. La aseguradora no implementó medidas para prevenir el fraude, lo que permitió que se asegurara una operación comercial fraudulenta. Como resultado, se la condenó a indemnizar a nuestro cliente con 259.992,63 €, más los intereses legales.
El tribunal concluyó que la aseguradora no actuó con la diligencia necesaria al no verificar adecuadamente la identidad del comprador, lo que permitió que nuestro cliente se viera afectado por una suplantación de identidad.
Este tipo de fraudes, como el que sufrió nuestro cliente, se aprovechan de las operativas prácticas de los seguros, utilizándolas como vía para cometer estafas de gran envergadura. En este caso, la aseguradora no implementó las comprobaciones necesarias, lo que facilitó el desarrollo del fraude y causó importantes perjuicios económicos.
Nos alegramos enormemente por nuestro cliente, cuya confianza y determinación han sido clave en la resolución de este caso. Este fallo establece un precedente fundamental en la responsabilidad de las aseguradoras en operaciones comerciales, subrayando la importancia de la diligencia y el control en este tipo de transacciones.
BATLLE & SEOANE ABOGADOS sigue consolidándose como un despacho de referencia en la lucha contra el fraude y en la defensa de los derechos de nuestros clientes.